Tan fuerte fue la acogida de esta tendencia, que
pronto empezaron a aparecer dibujos, acuarelas, y colecciones
interminables de fotografias.
Una de las pin-ups más populares fue Betty
Grable. Sus fotos estaban en los armarios de muchos soldados durante la
Segunda Guerra Mundial. Otras pin-ups eran dibujos, representando
generalmente modelos de belleza ideal. Un temprano ejemplo fue Gibson
girl, dibujada por Charles Dana Gibson. Hubo artistas especializados en
este género, como Alberto Vargas y George Petty. Entre los autores de
dibujos de pin-ups, figura también el dibujante y acuarelista
estadounidense John Willie, más conocido en el género de la historieta
erótica, por su obra Las aventuras de la dulce Gwendoline (The
Adventures Of Sweet Gwendoline).